lunes, 7 de septiembre de 2015

Por qué soy antisistema

Si el sistema es tener una tasa de parados superior al 22 % con más del 50 % de desempleo juvenil, es tener cerca de 220.000 jóvenes que han tenido que salir de España en busca de trabajo, es tener la corrupción tan arraigada en el partido que gobierna que debe pagar fianzas judiciales, es tener más de 2.000 políticos bajo sospecha por corrupción, es beneficiar a algunas empresas cuando se está en el gobierno para luego terminar en sus consejos de administración, es indemnizar en diferido, es tener líderes políticos a los que les toca la lotería muchas veces, es mandar al ministro peor valorado de un gobierno ya de por sí mal valorado a un retiro dorado en París, es conceder amnistías fiscales baratas a los amigos mientras la evasión tributaria es superior a 253.000 millones de euros por no querer poner medios para combatirla, es tener jueces en los altos tribunales elegidos por los partidos políticos, es tener tribunales especiales para juzgar a políticos, es tener un Tribunal de Cuentas donde no existen jueces sino políticos endogámicos, es tener pensiones especiales para políticos, es tener un ministro del interior que recibe en su despacho a un imputado por fraude, blanqueo de capitales y alzamiento de bienes, es hacer compatible lo público con lo privado, es tener a compañeros del partido imputados por corrupción cobrando del partido sin trabajar, es enviar SMS de apoyo a compañeros de partidos presuntamente corruptos cuando están siendo investigados por la justicia, es que un Juez tenga que registrar la sede nacional del partido porque no le entregan los informes que solicita, es destruir discos duros con información sobre corrupción en lugar de entregarlos a la Justicia, es destruir los libros de visitas para que no se pueda averiguar quién pasaba por la sede del partido, es indultar en consejos de ministros a allegados, es vender la funeraria municipal madrileña por 100 pesetas (0.6 euros) y que dos años más tarde logre beneficios de 1.000 millones de pesetas (6 millones de euros), es tener cuentas en Suiza sin declararlas, es tener tesoreros en el partido acusados de pertenecer a banda criminal, es construir obras públicas con presupuestos inflados que según se van erigiendo se vuelven a disparar, es levantar aeropuertos donde no aterrizan ni despegan aviones, es proyectar y edificar ciudades de la justicia en secarrales, es vender lo público barato para acabar privatizando, es que los diputados utilicen sus cargos públicos para su enriquecimiento personal sirviéndose de una normativa ambigua que se lo permite aunque sea indecente, es reformar las sedes de los partidos en B, es utilizar las televisiones públicas con fines partidistas hasta que quiebren por falta de credibilidad, es reunirse con dictadores, es vender armamento a países no democráticos, es reformar la Ley de Montes para poder recalificar terrenos quemados, es penalizar el autoconsumo de energías renovables para beneficiar a las grandes compañías eléctricas aún a costa de dañar el medio ambiente, es salir a navegar con narcotraficantes, es tener banqueros que estafan a personas mayores, a invidentes y a analfabetos, es tener consejeros y directivos que esquilman lo público para vivir como reyes con “tarjetas black”, es tener un país que se fragmenta por incapacidad de diálogo político, es tener un presidente del gobierno que raramente comparece en rueda de prensa, es cobrar sobresueldos en negro con el dinero de todos, es hacer reformas laborales para despedir barato y contratar más barato aún, es tener empleo basura y precario a la vez, es tener salarios de miseria mientras las empresas obtienen beneficios escandalosos, es que los ricos y las grandes corporaciones y empresas paguen menos impuestos que los asalariados, es subir el impuesto más injusto que existe (IVA) y bajar reduciendo tramos al más justo (IRPF), es incumplir normativas europeas de contaminación en las ciudades y luego pagar multas por ello, es dejar morir a la gente de hepatitis por no darles el tratamiento adecuado, es dejar en papel mojado la Ley de Dependencia, es dejar de contratar trabajadores en Sanidad para tener que externalizar los servicios, es ceder hospitales construidos con dinero público a empresas concesionarias, es levantar muros, poner vallas y concertinas para impedir el paso a refugiados que huyen del horror, es que, tras recortar en educación, no tengamos ninguna Universidad entre las 119 primeras del mundo, es subir las tasas universitarias más de un 33 % mientras se reducen las becas, es construir colegios a cambio de comisiones, es hacer promesas durante la campaña electoral para incumplirlas en el gobierno, es hacer que la deuda pública alcance el 100 % del PIB, es tener cerca de 400.000 hogares desahuciados durante la crisis mientras se rescata a la banca y existe un parque enorme de viviendas vacías, es tener una pobreza infantil del 33 %, es torturar sádicamente animales como espectáculo o fiesta nacional, es… si esto es el sistema, yo me declaro antisistema.
Pintada antisistema
Razón de ser de los llamados antisistema

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