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| Madrid, ciudad con aire irrespirable y ruido insoportable |
Cuando a la vista de los luctuosos datos de mortalidad por polución atmosférica la OMS clama endurecer la normativa de calidad del aire, Madrid y Cataluña, nacionalistas españoles e independentistas catalanes con cielos irrespirables, van de la mano y solicitan un aplazamiento de la agenda verde de la UE para poder seguir contaminando y machacar la salud pública desdeñando, además, la emergencia climática. También la derecha europea –¡cómo no!–, populares y liberales, exigen retrasar la entrada en vigor de la norma. Alucino.
¿En qué están pensando unos y otros? No se enteran de que sin salud ambiental no quedará nadie y tampoco habrá economía que valga. En España son más de 31.000 las personas que mueren anualmente por contaminación ambiental aliada del insufrible estruendo de las ciudades que también mata, 85 fallecidos al día.
Es una propuesta inmoral, que se atreven a hacer porque la ciudadanía, a pesar de ello, les vota. Como dijo Unamuno: “¡Qué país, qué paisaje y qué paisanaje!”.
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