viernes, 29 de enero de 2016

Ladran, luego cabalgamos

Ladran, luego cabalgamos
Ladran, luego cabalgamos
En lo que parece ser la consigna de ¡todos a una!, en las últimas horas estamos asistiendo a un ataque de verborrea, insultos, descalificaciones y actos desmedidos contra Podemos y el cambio que representa y que, sin haber gobernado todavía, ha conseguido modificar hábitos y comportamientos en política (si no existiera, habría que inventarlo). Desde Felipe González (leninismo 3.0), pasando por Aznar (chavistas-comunistas) y un desfasado Rafael Hernando (golpistas), continuando con los barones del PSOE y los dirigentes históricos desempolvados del mausoleo para presionar a Sánchez a que no pacte con ellos, y terminado con la ofensiva lanzada en Whatsapp y las redes sociales, este ataque coordinado sólo logra dejar en evidencia a los de siempre, la oligarquía, que, satanizando a Podemos y a los cinco millones de ciudadanos que lo han votado, pretenden que todo siga igual haciendo ver que están dispuestos a cambiar cosas. Por si no hubiese quedado claro, todo ello llega después del ninguneo de Ciudadanos, PP y PSOE para el injusto emplazamiento en los escaños donde han colocado a los nuevos parlamentarios electos.
Citando al novelista y dramaturgo alemán Goethe, que no a Cervantes por boca del Quijote, “pero sus estridentes ladridos sólo son señal de que cabalgamos”.

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En otro orden de cosas, el inclemente y frío invierno ya está aquí, señor Jean-Claude Juncker, presidente de la CE (palabras infladas, palabras pomposas, palabras grandilocuentes, palabras afectadas, palabras hipócritas, palabras engañosas, palabras falsas, palabras tramposas, palabras insensibles, palabras vacías, palabras huecas, palabras de tahúr, palabras febles) mientras la ineptitud y dejación de funciones de su política europea, entre cuyas obligaciones cuenta con el vinculante cumplimiento, desde 2009, de la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE que, en su artículo 18 sobre el Derecho de Asilo reza: “Se  garantiza  el  derecho  de  asilo  dentro  del  respeto  de  las  normas  de  la  Convención  de  Ginebra  de  28  de julio   de   1951   y   del   Protocolo   de   31   de   enero   de   1967   sobre   el   Estatuto   de   los   Refugiados   y   de conformidad  con  el  Tratado  constitutivo  de  la  Comunidad  Europea”, hace que miles y miles de refugiados, niños, jóvenes, adultos y ancianos continúen su innecesario y trágico calvario por las tierras y costas de Europa que, en demasiadas ocasiones, concluye con el pago de sus vidas.
Insisto en dos certidumbres:
• Nadie abandona su país, la tierra que le vio nacer, porque sí.
• Usted, señor Jean-Claude Juncker, usted que me está leyendo, y yo, haríamos lo mismo que ellos en idénticas circunstancias.
¡Qué monumental deshonra para esta vieja, acomodada e hipócrita Europa!

5 comentarios:

  1. Con su excelente predisposición al contraste de opiniones, seguro que no tendrá usted inconveniente en que les sugiera a sus respetables seguidores la audición del comentario alojado en el siguiente enlace:

    http://vod.cope.es/audio/2016/02/05/audio-herrera_1454659596403618.mp3

    Se trata sólo de venir a ilustrar —con un fino toque de ironía similar a los que usted utiliza— un poco más los asuntos que usted toca, sin que tampoco podamos calificar dicho comentario como incierto ni escasamente documentado.

    Una vez más: muchas gracias.

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  2. Foto de perfil de Pinareño Viejo
    Pinareño Viejo
    Otro tema más que añadir –y nada trivial– a la ya abultada lista de despropósitos del actual equipo de gobierno del Ayuntamiento madrileño (O sea: Podemos, con el apoyo del PSOE). Ayer, cuando escribía mi nota anterior, aún no se había dado a conocer la noticia que les indico esta mañana:

    http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/02/05/madrid/1454695514_093587.html

    http://www.elmundo.es/madrid.html

    Visto todo lo que llevamos acumulado hasta ahora, parece haber una más que aparente falta de capacidad de gestión/supervisión de la actual alcaldesa que, quizás por eso, se ve obligada a dejar en manos de unos concejales totalmente inexpertos, y es posible que demasiado sectarios, algunos asuntos que exigirían una realización mucho más cuidadosa.

    Pero descuiden, no habrá ni una sola dimisión. Tampoco se producirá un solo cese.

    Cuando todavía no se ha cumplido un año desde las pasadas elecciones municipales, la gente habla, y mucho, de muestras de nepotismo, sectarismo, revanchismo, hasta odio… Una fórmula excelente para “mejorar” la convivencia. No debería de extrañarles la pérdida de votos que se produjo en favor de la derecha en la comunidad de Madrid en los últimos comicios. Si siguen así no les auguro ningún éxito para las próximas municipales –excepto que formen otra coalición de perdedores–. Lo malo es cómo dejarán Madrid y a los madrileños mientras tanto.

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    Respuestas
    1. Estimado señor Pinareño:
      Le había anunciado que no malgastaría mi valioso tiempo respondiendo a sus mensajes pero, ante tal agresión a la verdad, y por última vez, no me callaré:
      1. Hasta donde yo sé (infórmese antes de escribir) no ha sido el Consistorio actual quien contrató a esta nefasta compañía de títeres sino que solamente han renovado el contrato que mantenía con el Consistorio de Ana Botella. Ya había actuando en diversas ocasiones en Madrid. Incluso, el 11 de mayo de 2014, durante las fiestas municipales celebradas en honor de San Isidro, lo hicieron en el escenario principal de la Pradera.
      2. Que, evidentemente, la función no era para niños y, por no supervisarla, el director artístico que programó el espectáculo ha sido destituido.
      3. Que en el equipo de Manuela Carmena están "indignados" con lo sucedido y son ellos los que han presentado una denuncia contra la mencionada compañía de títeres por incumplir el contrato al representar una obra en la que se escenificaron "actos ofensivos y lesivos para la sensibilidad, especialmente atendiendo a la edad del público".
      En cualquier Administración pueden florecer malas hierbas o graves errores de dirección. La diferencia radica en cómo se gestione el problema y, como observará, al contrario que en otros equipos de Gobierno, la firmeza y celeridad en actuar ha sido máxima.
      Una vez más desvelada su supuesta “imparcialidad” y sin perder más tiempo en el asunto, le saludo por última vez.

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    2. La delirante, pasmosa y pretenciosa desfachatez de sus respuestas, así como la escasa e infantil consistencia de sus argumentos, únicamente consiguen poner al descubierto su empecinada y radical postura populista, además de evidenciar una gran falta de capacidad para encajar las críticas, lo que, en su conjunto, dice muy poco en favor de su talante democrático, si es que usted posee esa virtud.

      Sería preciso contestarle a usted con mucha mayor amplitud (sé que no lo desea, aunque yo sí), pero ahora mismo no dispongo de tiempo suficiente para hacerlo y, además, en estos momentos me encuentro muy poco dispuesto a ello. El ejercicio de mi bendita profesión me ha deparado un fin de semana especialmente duro y complicado, y apenas he podido dormir cuatro escasas horas desde el pasado sábado. Más adelante, si usted me lo permite, lo haré, y lo haré con profusión. Confío que antes no vaya usted a vetar mi acceso a esta página, algo que sin duda podría usted hacer para impedir que apareciesen aquí más comentarios míos, pero que no creo que haga porque eso sería lo que aclararía definitivamente su verdadera calidad democrática. (Lo digo para que quede la debida constancia en el caso improbable de que llegase a suceder).

      En el ínterin, recomiendo, por su interés, (a usted también) la lectura de las siguientes opiniones y noticias:

      http://www.elmundo.es/madrid/2016/02/06/56b5e14b22601d234e8b46b7.html

      http://www.elmundo.es/opinion/2016/02/07/56b65186ca4741cd478b461b.html

      http://politica.elpais.com/politica/2016/02/06/actualidad/1454779393_058638.html

      http://politica.elpais.com/politica/2016/02/06/actualidad/1454762948_742499.html

      Termino animándole a que no malgaste su precioso tiempo volviendo a contestarme. Ni necesito ni deseo sus prepotentes y vacuas respuestas.

      Hasta la próxima.

      (Pido excusas pues las prisas y el cansancio me han llevado a colocar este mismo comentario en un espacio que no correspondía).

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    3. Se lo dije una vez y se lo vuelvo a repetir: escriba, escriba cuanto quiera... yo le leeré, jamás le vetaré.

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