Los cantos de sirena del FMI

El FMI escudero del neiliberalismo

Renegando de sus principios fundacionales –combatir la pobreza–, las políticas del FMI promueven un capitalismo neoliberal que favorece a los poderosos y agiganta la brecha entre ricos y pobres. Por eso ahora exigen a España subir el IVA, contratar planes de pensiones privados y moderar salarios; y, hace poco, contrato único e incremento del copago sanitario.
Examinemos este insensato canto de sirenas que demuele igualdad y Justicia Social: el injusto IVA lo abonan por igual ricos y pobres. Para quien pueda contratarlo, el plan privado de pensiones no garantiza su cobro, pero sí favorece a los potentados. La moderación salarial es aplicable a todos menos a sus abultados sueldos. El contrato único apuntala la reforma laboral de empleo precario y míseros salarios. Y, por último, el copago farmacéutico hace que enfermos desfavorecidos dejen su tratamiento, ocasionando mayor gasto a la SS por el agravamiento de sus males.
¿Al final culparán a los pobres de su pobreza?

La normalidad para Rajoy

Esto no es normal

Argumentó Rajoy que él iría a declarar con total normalidad en el juicio de la Gürtel. Hoy hemos sabido que esa normalidad pasa por declarar desde el lateral, donde se sientan jueces y fiscales, y despejar la agenda de un Presidente del Gobierno durante cinco días para así poder preparar su declaración con asesores y abogados; una declaración en la que, como testigo, solo debe decir la verdad de lo que conoce cuando le pregunten.
Y yo, atónito, planteo: ¿hay algo que preparar para contar la verdad?

¿Vacaciones voluntarias?

Cristina Cifuentes

El Estatuto de los Trabajadores establece claramente que el período vacacional no es sustituible por compensación económica, confiriendo, por tanto, su carácter obligatorio.
Cristina Cifuentes, Presidenta de la Comunidad de Madrid, puede hacer lo que quiera con su agradable quehacer (al contrario que la mayoría de españoles que trabajan duramente por una miseria), pero que lo haga discretamente y no nos venda lo trabajadora que es. Recordarle Mateo 6:3-13: “Que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu mano derecha”.
Además, subliminalmente ¿qué está queriendo implantar? ¿Qué las vacaciones deban ser voluntarias? ¿Acaso el neoliberalismo no ha conquistado suficientes parcelas?

Maillo: alegato indecente

La postura del PP contra la corrupción, continúa siendo patética

Sostiene Maillo que el PP es el que “más ha hecho para acabar con la corrupción y en solitario". ¡Ahí queda eso! Si no fuera por lo grave del asunto y los recortes sociales que ha supuesto la podredumbre política, sería para reír y no parar; pero, por el calibre de la insolencia, la carcajada se torna indignación.
El PP ha hecho y hace cuanto puede para no asumir responsabilidades: desde pretender anular juicios, pasando por la destrucción de pruebas, la recusación a jueces o la pérdida de documentos, hasta la utilización de la Fiscalía.
Rajoy, que hasta el final ha ansiado testificar por plasma, tiene una oportunidad única de demostrar su implicación real en tan desigual lucha durante su comparecencia ante el tribunal que juzga la Gürtel. Él, con tantas décadas de responsabilidad en su partido, estaba allí cuando pasó y algo debe saber; aunque conocedor de que las encuestas no le penalizan, seguramente se atrinchere arguyendo que él sólo pasaba por allí.

Incendios forestales: hora de corregir

Los incendios forestales, un crimen que destruye la vida, presente y futura.

Tristemente este verano la árida España arderá por los cuatro costados, y según parece batiendo récords. Los recortes presupuestarios tienen mucho que ver con el imprudente estado de abandono de nuestros montes. Han acarreando reducción de personal, escaso desbroce y mínima renovación del material antiincendios. Pero, dicho esto, a mí me surge la duda de si en realidad los incendios forestales no serán fruto de la reforma de la Ley de Montes que el Partido Popular aprobó en julio de 2015 con su mayoría absoluta. Sólo recordar que este cambio permite a las autonomías recalificar zonas forestales quemadas “cuando concurran razones imperiosas de interés público de primer orden”.
Así visto, seguramente la Ley esté cumpliendo sus ocultos fines y se esté especulando ya con futuros terrenos a calcinar. Con urgencia, y aprovechando que el PP hoy gobierna en minoría, sus señorías deberían prohibir toda recalificación de los terrenos abrasados.

Día Mundial de la Población

El 11 de julio se celebra el Día Mundial de la Población

Teniendo en cuenta que el día Mundial de la Población se celebra el próximo día 11, al menos sopesemos nuestra herencia a las futuras generaciones: la población, motor del consumismo para provecho de muy pocos, aumenta a un ritmo tan endiablado que agota y contamina los recursos, avivando el cambio climático. En el año 1000, unos 310 millones de personas habitaban la Tierra. En 1800 se triplicó la población pasando a 970 millones. En 1900 casi se dobló con 1.650 millones de individuos. En 1965 se duplicó la cifra contabilizando 3.335 millones de habitantes. Y hoy hemos vuelto a doblarla con holgura al ser más de 7.600 millones de seres humanos. Y según estimaciones de la ONU, en 2100 la población rozará los 11.000 millones. ¿Alguien cree que el medio ambiente es capaz de soportarlo todo? ¿Alguien supone que semejante crecimiento demográfico exponencial posibilita un desarrollo sostenible con la salud de nuestro mundo? ¿Alguien me garantiza que no legaremos devastación?

De reprobados y caraduras

De momento van dos mnistros reprobados, Montoro y Catalá. ¿Habrá más?

En España cuando la mayoría de la Cámara, que representa a la mayoría de españoles, reprueba a un ministro, en el Gobierno salta la sinrazón, y un impertérrito Rajoy, despreciando y corrompiendo el proceder democrático y trivializando las resoluciones de la sede de la soberanía nacional, ni lo obliga dimitir, ni lo cesa. Como la reprobación es una falta de aprobación, ¿con qué autoridad puede un ministro reprobado sentarse a negociar con la misma oposición que lo ha censurado? Con Rajoy, la representación parlamentaria queda a los pies de los caballos.
Ya que el sentido común no se estila –si la mayoría me reprueba, dimito–, debería legislarse para que este mecanismo político, al igual que en la Constitución republicana de 1931, implique un cese inmediato. Así, este tipo de actuaciones parlamentarias cobrarían sentido. Actualmente, como no obliga a nada, todo se soluciona con tener un rostro pétreo para ir tirando con cuantos ministros reprobados sea necesario.