Europa en la cuerda floja

Esta Europa, en la que cada cual va por su lado, se está metiendo en una encrucijada que acabará con ella

En 1950, Robert Schuman, ministro francés de Asuntos Exteriores y visionario arquitecto de la Unión, en su propuesta para la creación de una Europa tal como la conocemos, sentenció que se trataba de «crear una solidaridad de hecho». Asimismo, y según la propia web de la Unión Europea, su bandera con 12 estrellas sobre fondo azul simboliza «los ideales de unidad, solidaridad y armonía entre los pueblos de Europa». Bien, pues si tiene que haber un momento para mostrar auténtica solidaridad, unidad y armonía, que no percibo por ningún lado, es ahora con esta calamidad que nos afecta a todos.
Actuar de manera inflexible y egoísta, como hace la UE, es ir contra su propia génesis. En 2008 ya fue insolidaria con los que llamaban PIGS (cerdos), Portugal, Italia, Grecia y España. Si Europa renuncia a la solidaridad y la justicia social vulnerando sus propios principios fundacionales, no vale nada. ¿Cuál será entonces su razón de ser? ¿Para qué queremos pertenecer a una UE no comprometida?