Ayuso hace magia en la supuesta zona confinada de Guzmán el Bueno de Madrid |
Ayuso defiende a capa y espada, que «cuanto más pequeños son los cierres mejor funcionan». Vivo en el linde de la zona sanitaria del Guzmán el Bueno. Cada una de las cinco jornadas que llevamos de supuesto confinamiento, he recorrido al menos dos veces al día en distinto horario los 3,8 kilómetros de su pequeño perímetro sin tan siquiera observar un solo control policial; pero sí el despelotado trasiego habitual de personas y coches cruzando sus hipotéticas fronteras. No sé si en otras zonas confinadas del extrarradio que, al contrario que esta perteneciente a Chamberí y Centro, no son caladeros de votos del PP, existen controles. Constato que aquí, ninguno. Por ello deduzco que la señora Ayuso debe tener fantásticos poderes extrasensoriales pues sus números referidos a la pandemia no paran de bajar mientras la ósmosis en el perímetro de su «pequeño confinamiento» es total.