Algunos millonarios inteligentes tienen motivos para inquietarse |
Desde el desembarco a la política real de las teorías neoliberales con Reagan y Thatcher, la desigualdad no ha parado de crecer. Nunca los milmillonarios han abonado menos impuestos que ahora, alrededor del 8% –menos que usted o yo–, cuando a mediados del siglo pasado pagaban más del 90%. Ello pone en riesgo la paz social.
Y así, en Davos, algunos multimillonarios inteligentes –y altruistas, no lo discutiré– están alarmados. Más de 250 de ellos –ningún patriota español– han firmado una carta solicitando a la élite política «pagar más impuestos –conscientes de que ellos y sus herederos continuarán viviendo exquisitamente– para lograr un futuro democrático común» y construir una sociedad más justa mejorando los servicios sociales y la vida de la gente. Son personas lúcidas, sabedoras de que la riqueza desmedida erosiona las democracias y carcome la paz social. Añaden que «la desigualdad ha llegado a un punto de desequilibrio», e inquietos por lo que pueda venir, exigen «actuar ya».
El neoliberalismo es una bomba para la convivencia. Estos sí que son patriotas.