El PP, heredero del franquismo, es lo peor que le ha pasado a España |
La intolerante ultraderecha, cuando pierde el poder y la izquierda gobierna, se echa al monte. Y cuando observa que, además, legisla y desmonta privilegios ancestrales, hiperventila. Es ladina. Trata de fragmentar a la izquierda utilizando argucias bajo la máxima de “divide y vencerás”.
¿Cómo lo hace? Muy sencillo, ¿recuerdan aquello del felipismo, o el zapaterismo? Pues, ahora, del mismo creador, llega: combatir al sanchismo.
Son maquiavélicos y tienen el privilegio de repartir carnets «de buenos socialistas y buenos españoles»; dicen respetar el socialismo –cuando en realidad lo denuestan desde el principio de los tiempos– y que solo «combaten los personalismos» que ellos mismos han urdido con el deseo de provocar la división. Son rastreros y ruines.
Y no paran ahí: incumplen la Constitución y sueltan barbaridades como la sostenida por Aznar de que en España se gesta «un golpe de Estado al orden constitucional».
¿A qué espera?, buen español. Corra con las pruebas a denunciarlo y no envenene.