Díaz Ayuso sigue compitiendo con Vox con su populismo nacionalista de ultraderecha |
La ultraliberal y madrileñista Díaz Ayuso siempre anhela dar la nota. Cuando critican su gestión contraria a toda lógica, acusa a quien sea de «madrileñofobia» y utiliza a los ciudadanos y el territorio que gobierna de parapeto. Es decir, para confrontar y crispar la política calca comportamientos separatistas y se hace la víctima jugando con la salud de los madrileños. Así Ayuso, encarnada en oposición visceral al Gobierno de España, va camino de la conquista de Génova. Su última pirueta ha sido convocar elecciones en medio de la trágica pandemia. Cuando en Cataluña actúan así, hay que oírla. Su provocador nacionalismo, engalanado de falso patriotismo, es lo mismo.
Utilizar las críticas a su gestión para fomentar el victimismo con disyuntivas insensatas –yo o el caos– y su rebeldía contra todo lo que el Estado legisla, es táctica vieja usada por separatistas y trumpistas.
Y, como «Madrid es España», el día menos pensando la España de Ayuso inicia un procés y se independiza del Estado.
Utilizar las críticas a su gestión para fomentar el victimismo con disyuntivas insensatas –yo o el caos– y su rebeldía contra todo lo que el Estado legisla, es táctica vieja usada por separatistas y trumpistas.
Y, como «Madrid es España», el día menos pensando la España de Ayuso inicia un procés y se independiza del Estado.