Los bienes esenciales no deben ser campo de especuladores |
En 2010 la ONU reconoció el acceso al agua como un derecho esencial inherente a toda persona, debiendo garantizarse su calidad, su sostenibilidad y su distribución a un precio justo. Sin embargo, y contrario a la lógica, esta semana, este líquido vital para todo ser vivo, ha pasado a formar parte de la salvaje especulación bursátil capitalista en el mercado de futuros, el más agresivo que existe, y que terminará por afectar a su precio. Ocurrió con el trigo y en poco tiempo cuadruplicó su precio acrecentando las filas del hambre en más de doscientos millones de personas. Y que no nos vendan las bondades de su entrada en bolsa. La realidad es que los especuladores se forrarán a costa de todos con un bien imprescindible que, desde su compra a su venta, no sufre ninguna transformación que le añada valor. Se puede vivir sin petróleo o sin oro… pero no sin agua o trigo. Los productos de primera necesidad no deben caer en manos de especuladores.
¿Qué será lo próximo? ¿El aire que respiramos?
¿Qué será lo próximo? ¿El aire que respiramos?