martes, 20 de junio de 2017

Rafael Hernando, ¿en serio?

Rafael Hernando, el pendenciero del Congreso
Rafael Hernando, el pendenciero del Congreso
Cuando se supo que Rafael Hernando intervendría en la moción de censura, cundió la expectación entre sus filas, siempre prietas, «¡A dar caña, Rafa!, je, je...», el hartazgo entre la oposición, «Uf, seguro que enfanga el debate» y la curiosidad entre la prensa, «¿Volverá a calentársele la boca?». Y no defraudó. Un desfasado Hernando, avezado camorrista que rehúsa conducirse con corrección y respeto cuando la ocasión lo requiere, con su lenguaje tobillero de palabrería cicatera, cruzó la raya de lo tolerable –como cuando se burló de las víctimas del franquismo–, y violentó la privacidad de los sentimientos más íntimos. Espoleado por su rancio automachismo, aludió a lo peligroso, según él, de que una mujer brille más que su pareja. Y, por indigno e inconcebible, anonadó a muchos españoles, «¿Cómo es que una tras otra el PP mantiene de portavoz a semejante perdonavidas?, ¿será la plana mayor popular del mismo parecer?».
Rafa, en serio, ¿34 años de político profesional para llegar a esto?

jueves, 15 de junio de 2017

Campos de refugiados

Los campos de refugiados son infiernos del siglo XXI
Los campos de refugiados son infiernos del siglo XXI
Con motivo de la celebración, el próximo día 21, del Día Mundial del Refugiado, conviene hacer una reflexión sobre una situación que, debiendo ser provisional y de muy corta duración, se ha transmutado en campos de concentración a largo plazo.
Arriesgando sus vidas, los refugiados huyen del horror. Cuando llegan a otro país, son confinados en campamentos –avergüenza llamarlo guetos– y condenados a subsistir en un infierno. Sin poder salir y sin trabajo, consumen la jornada en una inútil espera que les devuelva la ilusión de vivir. Comida aborrecible, frío, lluvia, barro, calor, sol o polvo, realidades deplorables, son el pan de cada día. ¿Y qué decir de los niños? Angustia ver sus enormes ojos en sus caritas de sonrisas borradas. Para llorar sin consuelo.
En la era de la frivolidad, observar el Mediterráneo convertido en fosa común o los refugiados cautivos en un limbo eterno, purgando el infame pecado de buscar un futuro para sus familias, parece no angustiarnos. Como en el Holocausto, unos pocos altruistas ayudan arriesgándose a ser multados o detenidos. Sin duda, los refugiados son los nuevos apestados del siglo XXI. Lo que acontece a diario, degradante trato a seres humanos, es deshonra para el resto del planeta.

lunes, 12 de junio de 2017

¿Hay prevaricación en la amnistía fiscal?

En la amnistía fiscal de Montoro es posible que exista prevaricación
En la amnistía fiscal de Montoro es posible que exista prevaricación
El Consejo de Ministros que aprobó la amnistía fiscal de Montoro, sabía que una de sus consecuencias sería la ruptura de equidad, alterando el criterio del reparto de la carga impositiva de acuerdo a los principios de capacidad económica y progresividad. Además, y según la sentencia del Constitucional, Montoro faltó a su deber legal de recaudar para sostener los gastos públicos y eximió a los amnistiados de toda responsabilidad accesoria, lo cual podría incapacitar a la inspección de Hacienda para incoar cualquier investigación pues se entendería contaminada por la regularización.
El delito de prevaricación consiste en dictar, por servidor público o autoridad, una resolución arbitraria en asuntos administrativos o judiciales a sabiendas de que la misma es injusta y contraria a la ley. Y nadie puede refutar que este indulto era insostenible pues quebraba la justicia tributaria y contrariaba el ordenamiento recaudatorio.
Montoro debe dimitir y la Fiscalía, representante del interés de toda la sociedad, debe investigar de oficio si, en aquel Consejo de Ministros, se prevaricó.

sábado, 10 de junio de 2017

Patriotas de papel

Patriotas de banderita
Patriotas de banderita
Muchos de los que tan soberbiamente lucen banderita en pulseras, tirantes o solapas, dignos próceres españoles, tienen cuentas o empresas en paraísos fiscales, sicavs aquí tributando al 1% o han sido fiscalmente amnistiados.
En las altas esferas parece que si no defraudas eres un mindundi. La lista conocida de estos patriotas es demasiado larga y está cortada por el mismo patrón: la golfería. Defensores a ultranza del neoliberalismo y únicos que saben amar apasionadamente a su país, con una mano roban cuanto pueden y con la otra, escudados en la crisis, recortan derechos y desmantelan el estado de bienestar. Estos patriotas, cuya bandera es en realidad la del paraíso fiscal de turno, son patriotas de papel… de papel moneda, cuyo epinicio, con permiso de Espronceda, podría ser:

Que es mi partido mi rendimiento,
que es mi líder quien me tapa;
mi ley, trincar el tres por ciento;
mi única patria, la pasta.

Y yo añado: sí, la pasta de los demás.

martes, 6 de junio de 2017

Acabar con el terrorismo

Stop al terrorismo
Implementando otras medidas, tal vez se logre más
Hace tiempo que sufrimos una barbarie terrorista sin fronteras. Eliminar esta atroz amenaza, no es fácil. La guerra por sí sola, por lo injusto de sus víctimas inocentes –daños colaterales dicen–, ha demostrado agravar la situación. Para tratar de acabar con los terroristas, y no con la población civil que vive bajo su yugo, hay que implementar otras medidas y ver su efectividad: erradicar el tráfico de armas, uno de los negocios más rentables que existen. Liquidar el contrabando de petróleo que sale de Siria y con el que se sostiene el Estado Islámico. Prohibir los paraísos fiscales evitando que el terrorismo se financie tan cómodamente. Dejar de tener como “países amigos” a Estados que respaldan este terrorismo, como Catar, Arabia Saudí, Kuwait... Establecer un ejército de intervención a pie con soldados de países vecinos, teniendo apoyo de Occidente en logística y bombardeos a objetivos militares específicos y sin riesgo para los civiles.
Con auténtica voluntad, tal vez se avance.

jueves, 1 de junio de 2017

El pisito, o cuando un clavo saca a otro clavo

En España deben exigirse responsabilidades políticas
En España deben exigirse responsabilidades políticas
En España son tantos los casos de corrupción –política, moral o económica– que se amontonan sin solución de continuidad. Lo nuevo entierra rápidamente a lo reciente y los escándalos se marchitan por el desagüe del olvido. Así, el común de los mortales incapaz de asimilarlos todos, arrincona algo que, de otra manera, debería haberse condenado. Y como muestra un botón de hace solo dos meses: ¿quién se acuerda del piso de Gregorio Serrano, director de Tráfico, que recibió un trato privilegiado del ministro del Interior y que quedó impune?
Cualquier injusticia cometida por quienes ostentan el poder debe tener reflejo en la acción política. Sin responsabilidades políticas, los ciudadanos vivimos con la incertidumbre de si el Gobierno otorga prebendas y cargos a sus fieles con recursos del Estado.
Si anhelamos una política honesta, cuando los hechos evidencien tratos de favor, han de investigarse y sancionarse sin dilación. Lo contrario es, perdón por la expresión, enmerdar la política.

lunes, 29 de mayo de 2017

Rajoy y las instituciones

Rajoy dice tener un respeto institucional que no tiene
Rajoy dice tener un respeto institucional que no tiene
A Rajoy se le llena la boca acusando a los demás de no respetar las instituciones. Cualquier despistado que no lo conozca creerá que él sí las aprecia. Como Rajoy siempre ha flirteado con los lindes del sistema, se podrían poner muchos ejemplos de su falta de respeto institucional; pero vamos a los tres más recientes: desde su despacho de La Moncloa ha movido los hilos para que afines al PP ocupen todos los puestos claves de la justicia. Hace poco escogió declarar por plasma como testigo de la Gürtel, con agravante de “estivalidad” –finales de julio–. Y ha descartado responder a Iglesias en la moción de censura, mostrando su menosprecio al Parlamento, casa de la democracia y representación de la soberanía nacional.
Eso sí que es degradar las instituciones, algo muy peligroso que logra desmoralizar y distanciar a los ciudadanos de ellas.