Ante la contundencia de los buenos datos, el PP vuelve a sus rancios comodines |
El PP –cuyo supuesto mito de buena gestión económica no es más que puro marketing–, ante la bondad, contundencia y obstinación de los datos económicos que llegan, la desarticulación de la burla a las medidas energéticas al ser copiadas por Europa y su siembra “trumpista” en terreno baldío al proceso electoral y los datos de paro, se ha visto obligado a recular y volver a tirar de su rancio argumentario para resucitar a ETA y el independentismo catalán. Eso sí, soslayando lo que pactaba Aznar con el «movimiento de liberación vasco» mientras asesinaba, la cesión a Cataluña y la promesa de cesión a Navarra de Tráfico, sus acuerdos con Pujol, o los pactos de Maroto con Bildu sosteniendo que «han pretendido la paz desde el principio», o las diez veces que negoció el Partido Popular vasco con la fuerza abertzale o sus antecesores –incluso con ETA asesinando–, una coalición política, que nos guste o no, cuenta con absoluta legalidad y garantía constitucional.
Patética oposición: ¡Ya está bien!