La política sanitaria de Ayuso ha colocado a la Sanidad contra las cuerdas |
Ni las autoridades hicieron campañas didácticas masivas advirtiendo que la vacuna no corta contagios ni la transmisibilidad del virus, ni las televisiones trasladaron certezas al retransmitir a cara descubierta en platós cerrados. Y, mientras nos autoengañábamos fingiendo que la pesadilla había acabado, las vacunas solo hacían su trabajo: esquivar la muerte y el ingreso hospitalario, que no es poco.
España está mal. Madrid, es de traca: furgón de cola en la vacunación y ahora en el refuerzo, colapso sanitario de interminables filas, imposible contactar con el centro de salud, atención primaria cara a cara inalcanzable, suspensión de operaciones no urgentes... Pero eso sí, recortes en sanidad y bajada de impuestos a ricos. Los ciudadanos exigimos asistencia ambulatoria, atención médica y pediátrica presencial y acabar con las listas de espera. Y Ayuso, eludiendo su pésima gestión, echa balones fuera y alude a un boicot médico. Indignante, aunque luego… la votarán. ¡Viva la libertad!.