Aunque muchas veces Gabriel tiene razón en lo que dice, a veces patina |
Sostiene Gabriel Rufián que «no es que Ciudadanos sea incompatible con Esquerra, es que es incompatible con la izquierda».
Bueno… aunque en realidad lo que importa es qué se pacta y no con quién, la segunda parte de la frase, cogida a bote pronto, es razonable. Lo que chirria es que sale de labios del portavoz de un partido que se dice de izquierdas y que, además de ser contrario al internacionalismo socialista, rasgo identificador del movimiento progresista, forma parte en Cataluña de un Gobierno de coalición con JxCat, que es de derechas como Ciudadanos; o incluso más, como el PP. Baste recordar mayo de 2011, con las protestas masivas y el asedio al Parlament para reprobar la corrupción y los brutales recortes en sanidad y educación que ponía en marcha el Govern de la Generalitat de Artur Mas.
A pesar de que la política, como bien dijo el propio Gabriel, consista en cabalgar contradicciones, hay algunos argumentos que chirrían.
Prudencia, Gabriel.