domingo, 29 de marzo de 2020

Coronavirus. ¿Actuó el Gobierno a tiempo?

Coronavirus y confinamiento: la realidad de las cifras estadísticas no engaña
Coronavirus y confinamiento: la realidad de las cifras estadísticas no engaña
Por supuesto que se habrán cometido errores, todo el que gestiona los comete. “Errare humanum est”. Pero a toro pasado todo parece fácil y evidente.
Voy con datos y que cada cual juzgue lo que sus entendederas den de sí.
Cuando en Italia la funesta cifra de fallecidos alcanzó los 463, decretó el confinamiento, Reino Unido lo hizo con 281 y Francia con 148; el Gobierno español con 120. En el momento de arrancar esta medida, el número de contagios en cada país eran 9.172 en Italia, 6.576 en Reino Unido y 5.687 en Francia; España, por debajo, solo 4.231.
¿Se podría haber hecho antes? Visto el problema desde la perspectiva actual, sí; pero cualquier medida que se tome antes de declarar la emergencia parecerá excesiva y cualquier medida tomada después parecerá insuficiente.
Por cierto, el tan vapuleado por la derecha, Fernando Simón, fue nombrado en 2003 alto cargo de Sanidad, concretamente Coordinador del Grupo de Respuesta Sanitaria del Centro Nacional de Epidemiología por Aznar; y, en 2012, Rajoy lo designo además portavoz de Sanidad para la crisis del SARS y, más tarde, en 2014, portavoz de Sanidad en la lucha contra el ébola. Dado su enorme prestigio, el PSOE lo ha mantenido.
Por cierto, a día de hoy, Alemania con 53.000 contagiados y 400 muertos aún no ha iniciado el confinamiento.

viernes, 27 de marzo de 2020

¡Es la guerra! ¡Más ERTEs!

Las grandes empresas deben parar de abusar del Estado por medio de los ERTEs
Las grandes empresas deben parar de abusar del Estado por medio de los ERTEs
Vivimos momentos críticos. Por eso, las grandes empresas que cosechan miles de millones en beneficios de la sociedad, deberían olvidarse de los ERTEs, y, al igual que los ciudadanos se sacrifican para derrotar al virus, renunciar a esta regalía asumiendo el coste de su más preciado patrimonio, sus empleados, e ingresarles la nómina sin abusar del Estado, que así podrá destinar el dinero a las pymes que lo necesitan más. Si este año no logran beneficios, ya los tendrán.
Lo que está ocurriendo afecta a la sociedad en su conjunto, y todos debemos arrimar el hombro. No se puede solicitar un ERTE angustiando a decenas de miles de trabajadores y luego, para lavar la imagen en una excelente operación de marketing que la ciudadanía aplaude sin intuir la verdadera jugada, donar unos milloncejos para combatir el virus.
Este año y en esta situación, no es ningún drama rebajar las ganancias o asumir pérdidas. Vienen de ejercicios muy boyantes en sus cuentas de resultados. Sean responsables y dignos.

miércoles, 25 de marzo de 2020

El cariño en tiempos del coronavirus

Este dañino virus, además de matar, nos tortura el alma
Este dañino virus, además de matar, nos tortura el alma
Al privarnos de emotivos gestos cotidianos –un beso, un abrazo, un roce, una caricia, la simple cercanía o, en el más desolador de los casos, el último adiós–, esta despiadada plaga nos erosiona el alma.
Como todos, anhelo el reencuentro con familiares y amigos que llevo en el corazón; pero mi nieta, que vive a cinco calles de distancia, por su delicada fragilidad infantil posee un cachito propio. Me cuentan que todos los días pide ver a su gente e ir al parque. No imagino qué imagen del virus, que le impide ver a sus seres queridos, fantasea su vivaz cabecita. Añoro su alegre sonrisa, contemplar sus asombrados ojazos cuando le leo un cuento, darle un achuchón, comerla a besos, reírnos juntos, cantarle, bailar, jugar al pillapilla, al veoveo, al escondite, oír su dulce voz tratando de comunicarme algo esencial para ella con su lengua de trapo, arrobarme con su mirada curiosa demandando unos porqués…
Si arrimamos el hombro, pronto volveremos a juntarnos. Hasta entonces, mucho ánimo y más paciencia.

domingo, 22 de marzo de 2020

Trump y el coronavirus

Trump es dañino para la sociedad
Trump es dañino para la sociedad
Trump no cambiará. Su gestión en la crisis sanitaria, como en lo demás, ha sido impertinente e inmadura y, en el sentido estricto de la palabra, una burla. Desde su ascenso al poder ha tratado de demoler –primero en el Congreso y luego por la vía judicial– la sanidad de millones de estadounidenses que estableció Obama. Con su proceder negacionista, el virus ha galopado con implacable libertad.
Ahora desbordado y asustado pone la carne en el asador para contenerlo y ufanamente sostiene que él «siempre supo que este virus era una pandemia cuando nadie lo decía», y amedrenta a la prensa que le cuestiona acusándola de fabricar «noticias falsas» y «mal periodismo». Patético; pero lo alarmante para la sociedad será comprobar cómo, tanto allí como aquí con otros de parecido actuar, sigue llenando urnas.

jueves, 19 de marzo de 2020

En defensa de la sanidad pública

Los recortes del Partido Popular son demoledores y matan. ¡Ni un recorte más!
Los recortes del Partido Popular son demoledores y matan. ¡Ni un recorte más!
Una vez más, los profesionales de la pública, sobreponiéndose a la falta de medios materiales y humanos, están dando el callo en esta cruenta guerra al coronavirus. Y no hay que olvidar los miles de millones de recortes en Sanidad e Investigación del Gobierno de Rajoy y la brutal privatización sufrida en la Comunidad de Madrid gobernada por el PP, para valorar mejor a los profesionales que tenemos.
Rajoy la dejó hecha unos zorros, salvada con la voluntad personal de sus sanitarios, y Aguirre, a la que Ayuso sigue los pasos, trató de emular el modelo thatcheriano, que llevó al referente mundial al desastre. Aquí, alguien tratado en la concertada, llega a costar hasta 6 veces más que en la pública.
Al acudir a las urnas habrá que recordar que recortes y privatizaciones matan, que sin todos esos chanchullos estaríamos mejor y que a pesar de que algunos quieren enriquecerse, la Sanidad no es un negocio sino un servicio esencial. Jamás volvamos a consentir ningún recorte ni directo ni encubierto –vía desvío de medios a la concertada– de uno de los pilares fundamentales del Estado de bienestar.

lunes, 16 de marzo de 2020

Sembradores de caos

Algunos están locos y siembren el caos
Algunos están locos y siembren el caos
«Ni en la II Guerra Mundial vi algo así» comentaba un nonagenario italiano turbado por el egoísmo y la falta de educación y solidaridad que ha traído el desabastecimiento en supermercados de su país por el pánico al coronavirus.
En España, lo mismo. En una reacción, que algunos califican de humana –digo que será porque la provocamos los humanos–, a la inquietante situación que vivimos se suma el despreciable egoísmo insolidario para tornar a la ley de la jungla y arrasar con todo, provocando el caos que perjudicará a la sociedad en su conjunto; enfermos y población vulnerable incluidos.
Debemos seguir las recomendaciones de las autoridades y comprar a un ritmo normal para no desencadenar la profecía auto cumplida. Además, si es un virus pulmonar ¿a qué viene agotar las existencias de papel higiénico? ¿Nos dará diarrea? La mental es evidente.
Como el ítalo, también estoy atónito. ¡Y luego denostamos a quienes cruzan fronteras huyendo de la guerra y el hambre! Sensatez y responsabilidad.

jueves, 12 de marzo de 2020

Cáncer de mama

Cáncer de mama, un mal cruel
Cáncer de mama, un mal cruel
Hace año y medio que lucha sin descanso contra el cáncer. En este peregrinar su entereza ha sido ejemplo para todos los que la acompañamos con nuestros angustiosos miedos, terrores, alegrías, lágrimas, sueños rotos y desconsuelo. Ha pasado por múltiples retos: quimio, caída de pelo, bajón anímico, dolor al no poder tener otro retoño, operación y reconstrucción, radioterapia, tratamiento hormonal, inmunoterapia, efectos secundarios… Desgarradores días para el olvido. Su vida, y la de sus seres queridos, ha cambiado. Pero en la tiniebla ha sabido hallar la determinación, valor y coraje para enfrentarse al cáncer. Es mi hija Reyes. Está en la senda de la victoria amparada por los excelentes profesionales médicos que tenemos en la pública y el apoyo de su familia. Es una gran campeona y quiero mostrarle mi admiración y orgullo por su tesón en la guerra contra este cruel mal y reconocer, como no, el heroico combate que libran tantas otras batalladoras: Lolas, Marías, Rosas… ¡va por todas!