domingo, 8 de julio de 2018

De nuevo la inmoralidad de los paraísos fiscales

La indecencia continúa campando a sus anchas
La indecencia continúa campando a sus anchas
A pesar de la alarma social, vuelve la indecencia con la publicación de más Papeles de Panamá. Los Gobiernos no actúan, y así, las legislaciones consienten bancas opacas y países con fiscalidades mínimas. Hay que exigir a la ONU que liquide estos paraísos, prohíba el secreto bancario y obligue a tributar en el país donde se comercia, no donde se tenga la sede. Entretanto, nuestro Parlamento debería legislar para que a los concursos públicos concurran compañías sin conexión con estos territorios y elimine toda ayuda estatal a las empresas con vínculos en ellos. Se calcula que estos paraísos sangran a España 40.000 millones de euros al año. Mientras no se ponga coto, este inmenso sumidero fiscal –sibilina forma de corrupción– engullirá pensiones, hospitales, escuelas, e infraestructuras liquidando la justicia social.

miércoles, 4 de julio de 2018

Sanfermines, ¿crisol de héroes?

Estos sí que son héroes. Manifestantes del PACMA protestan por la masacre
Estos sí que son héroes. Manifestantes del PACMA protestan por la masacre
Ahora que los sanfermines están a punto de comenzar, quiero resaltar algo irracional: la forja de héroes donde no los hay. Telediarios, periódicos y radios, se hacen eco de este cruel evento que perpetúa el maltrato animal. Además –he aquí lo absurdo–, para la ocasión entrevistan a corredores como si fueran aguerridos gladiadores, cuando en realidad son individuos que se divierten trotando delante de un animal aterrado y desorientado que, apartado de su dehesa natal, ha sido trasladado a un extraño entorno urbano donde anida un intenso vocerío. Allí recibe golpes, tirones de rabo y patadas, sin saber que esa misma tarde acabará siendo cruelmente torturado e inmolado en el ruedo para jolgorio del gentío.
No, definitivamente no son héroes; son individuos que se entretienen con el dolor ajeno. Por favor, no los encumbremos.

domingo, 1 de julio de 2018

La izquierda obligada a entenderse

La izquierda está condenada a entenderse
La izquierda está condenada a entenderse
La izquierda tiene ante sí un deber histórico: reconquistar a la ciudadanía mediante políticas progresistas que devuelvan la esperanza tanto tiempo cautiva. Y para no dilapidar este momento, han de colaborar constructivamente y dialogar mucho para priorizar lo importante centrándose en las proposiciones que unen –que no son pocas: pensiones, repagos, ley mordaza, trabajo, desempleo, alquileres, IVA cultural…– para lograr acuerdos que mejoren de verdad la vida de los ciudadanos. Y, cultivando sus diferencias, suspender la conquista del espacio del otro y el cainismo que abrirían las puertas del fracaso con el veloz y seguro ascenso de la derecha al poder.
Y ante todo, y a pesar de que este Ejecutivo ha nombrado ministros desconcertantes –aguardar a ver sus obras–, no olvidar que si este Gobierno fracasa, se quiebra la ilusión.

jueves, 28 de junio de 2018

De qué regeneración hablan

No es regeneración, todos llevan años en este PP de las tramas de corrupción
No es regeneración, todos llevan años en este PP de las tramas de corrupción
En la carrera sucesoria de Génova, hay quien apoya a Cospedal por «defender como nadie al Partido Popular en los momentos más complicados y más difíciles», en clara alusión a los casos de corrupción del PP. Creo que defender a un partido condenado por corrupción no es una virtud, sino un lastre. Cospedal debería haber criticado la corrupción exigiendo una refundación para limpiar la podredumbre, en lugar de diferir despidos o consentir hacer añicos los discos duros de Bárcenas. Sáenz de Santamaría convirtió las ruedas de prensa del Consejo de Ministros en correa de trasmisión del ideario del PP, alimentó sin cesar las puertas giratorias, vació de contenido el Parlamento y aniquiló la televisión pública más plural que jamás existió. Y Casado, máster aparte, reivindica a Aznar y a Aguirre.
¿Renovación? No, es más de lo mismo.

miércoles, 27 de junio de 2018

El secreto del registrador de la propiedad

Parece que Rajoy se preocupó de cubrirse bien el riñón
Parece que Rajoy se preocupó de cubrirse bien el riñón
Rajoy deja el acta de diputado y reingresa como registrador de la propiedad. Pedazo de titular.
Escarbemos en el notición para tratar de descifrar el enigma: En 1998, siendo Rajoy ministro de Aznar, se reformó el Reglamente Hipotecario y se confeccionó un artículo ad hoc para que pudiese conservar su plaza indefinidamente. Siendo Presidente del Gobierno pretendió que la llevanza del Registro Civil, que gestionaban funcionarios públicos, fuera encargada a los registradores de la propiedad y, en 2015, los registradores añadieron una nueva tajada a su abultada remuneración con la tramitación de los expedientes de nacionalidad. Parece que Rajoy, en su gestión del poder, se ocupó mucho de su futuro y el de sus dos hermanos, también privilegiados registradores de la propiedad. Con tan perseverante empeño, como para no reingresar.

domingo, 24 de junio de 2018

La ineludible renovación de RTVE

La manipulación ordenada por el PP, con José Antonio Sánchez a la cabeza, alcanzó cotas intolerables
La manipulación ordenada por el PP, con José Antonio Sánchez a la cabeza, alcanzó cotas intolerables
El legado del periodista José Antonio Sánchez al frente de Radio Televisión Española, no puede ser más nefasto. Nombrado por Rajoy al inicio de su mandato, heredó un ente cosechador de acreditados premios internacionales, líder en audiencia y el más plural que jamás existió. Sin decoro, manipuló sin límites la cadena costeada con el dinero de todos: coacciones y malas praxis en informativos sometidos a un férreo control, pasando de puntillas por lo que perjudica al PP y acrecentando lo que afecta al resto, la abocaron a una absoluta pérdida de credibilidad y share. Además, emulando el afán privatizador del PP, vendió estudios y platós para acabar pagando servicios externalizados.
Y ahora, cuando el nuevo Gobierno pretende recuperar la pluralidad, PP y Cs arremeten ferozmente con su sectaria verborrea. ¡Eso sí es coherencia!

jueves, 21 de junio de 2018

La entelequia de la inflación

El fantasma de la inflación recorre el mundo
El fantasma de la inflación recorre el mundo
Gracias a que el poder alimenta la entelequia de que la inflación es conveniente, su amenazador fantasma deambula por el mundo. Por reducir el nivel de vida y menguar la capacidad de consumo de los más desfavorecidos muchos economistas la llaman «el impuesto de los pobres». Pero quienes la defienden alegan que si existe demanda, los precios deben subir. ¿Por qué?, ¿para acaparar más riqueza? Ya la tendrán al vender más; no necesitan subir precios porque entrarán en un círculo vicioso en el que los sindicatos exigirán subidas salariales para no perder poder adquisitivo, mientras los empresarios acusarán a estos porque la subida de salarios les obliga a subir los precios.
Este sinsentido beneficia al Gobierno de turno que, sin subir impuestos, recauda más. Y como apresuradamente se esfuma el valor del dinero, se despilfarra generando un consumismo innecesario que aumenta la producción de bienes. En este enredo muchas empresas aprovechan para subir precios, contribuyendo a disparar la inflación y a mermar el poder adquisitivo de los ciudadanos. De este modo sibilino, el dinero pasa de las manos de los ahorradores, a las arcas del Estado y Bancos Centrales.
Cuando una compañía retribuye honestamente a sus trabajadores, reinvierte en mejoras y tiene beneficios justos, no necesita incrementar precios. Y si algún empleado encuentra una mejora en productividad, parte de esos beneficios podrán ir a costes de personal sin necesidad de alzar los precios. Además, si no hubiera inflación, se acabaría el problema de subir las pensiones. Por eso, para evitar retrocesos en el nivel de vida, cada vez son más los economistas que sostienen que la inflación perjudica mucho más de lo que beneficia. Lo advirtió el economista británico John Maynard Keynes: «Mediante un proceso continuo de inflación, los gobiernos pueden confiscar, secreta e inadvertidamente, una parte importante de la riqueza de sus ciudadanos».